miércoles, 6 de febrero de 2013

Bajo los atardeceres




Es cierto…

a veces ya no importa nada,
cuando los telones caen
al terminar la obra,
y el trágico espectador del alma
se marcha en su tristeza

Pues ya ves…

que las horas se amontonan
y el tiempo, se viste de gala,
en esa despedida de lunas blancas
y pergaminos negros,
bañándose en mis ojos
al morir la tarde

Porque al final de la alborada

los otoños reposan en las bancas
y el caminante se marcha…
sin voltear su rostro,
porque ante la víspera del viento
el susurro de los sueños
ha quedado tan lejos

Sí, ya ves…

hay cosas que no comprendemos
y otras tantas que olvidamos,
en ese recorrer inquieto de la vida
sin más estaciones,
que los andamios vacíos de tus manos
sosteniendo mi nostalgia…

Por esa razón me marcho…

sin más despedida que el silencio
tallando los perfiles de un recuerdo,
quemándose en la tarde
bajo la mirada del ocaso intenso
que cuenta sus últimas palabras
derramadas sobre este verso!

Eileen

1 comentario:

  1. Que bonito escribes Eileen, mis comentarios por todos tus escritos.. te diré que el que más me gusto es ese que se llama Tú... Mis aplausos sinceros a toda tu obra que es divina. Besos querida poetisa.

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Que la palabra escrita...se grabe en tu pecho...y tu recuerdo en mi memoria...

Música del cielo