miércoles, 6 de febrero de 2013
Pérdidas
Sin más tregua
que mi propia tristeza,
empiezo a deshilar las sombras
en estos indecibles silencios
donde tu nombre grita
la plena soledad de mi agonía
allí…donde habitaste como un duende
en la ciudad perdida de mis sueños,
cayendo como las cascadas
hay veces, que las lágrimas
me han superado a solas…
y los vientos, me miran heridos
pero lo cierto es que la vida
-continúa-
aún después de perder el alma!
Eileen
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Que la palabra escrita...se grabe en tu pecho...y tu recuerdo en mi memoria...