Me quedé entre el vacío
de su sombra y mi consciencia,
del grito de la noche y la tristeza
y en ese oscuro espacio de sus ojos,
que hoy apenas parpadean
cuando la bruma asoma
y se me acerca
Me quedé entre el canto
de los duendes y las musas,
entre este mundo mío clandestino
...tan presente…
y la triste realidad de nuestra ausencia
contemplando al viento
Allí sobre la acera que se ciñe
al paso acelerado de los sueños
y la estampida del olvido,
que atormenta la paz de los nogales
y las bancas despintadas de los parques
donde paso…
Y es que me quedé entre el sórdido sabor
...de su boca y mi delirio…
de sus manos y la herida de un recuerdo,
que acaricio con los dedos tibios
y el regazo amontonado de silencios
que a solas empezaron a nombrarlo…
Sí...le confieso amado mío
que le temo a nuestro olvido,
y a la pagina de aquellos calendarios que se arrancan
aunque el tiempo intente contener las horas
y el minuto más amargo..se detenga…mi vida,
en el preciso instante de su despedida!
en el preciso instante de su despedida!
Eileen
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Que la palabra escrita...se grabe en tu pecho...y tu recuerdo en mi memoria...